Cumpleaños, efemérides

Como quizás alguien haya notado a través de algún comentario anterior, he cumplido años hace pocos días. El viernes 24, más precisamente. En un mail que mandé la semana pasada les hablé a algunos amigos de que ese día, "además de celebrarse el 24° aniversario del primer triunfo electoral de Perón", era mi cumpleaños.

El mismo 24 alguien me reprochó que lo nombrara a Perón en el mail. Mi respuesta fue que no había sido más que un chiste, y que además era la única efeméride que conocía de ese día. Alguna vez vi, cerca de la casa de una tía allá por San Fernando, un clubcito que llevaba como nombre esa fecha.

Pero un rapidísimo repaso de las efemérides por Internet me dice que hay -como es lógico, ya que los acontecimientos no tienen más que 365 opciones para elegir cuándo ocurrir- mucho más. Resulta que en 24 de febrero hubo algunos otros acontecimientos interesantes. Para citar sólo algunos: en 1848, los revolucionarios asaltaron el palacio de las Tullerías en París. En 1985 fue el grito de Baire, que significó el comienzo de la Guerra de la Independencia de Cuba. Y en 1917, comenzó una revuelta en Petrogrado que acabaría con la abdicación del Zar; o sea, fue el comienzo de la Revolución Rusa. Por ahí sea una estupidez, pero -si antes ya me parecía bueno cumplir años ese día- ahora que lo sé me parece aún mejor.

Mientras, yo hoy, con mis 28 años y 3 días de edad, estoy viajando a Madrid.