El custodio es la ópera prima de un realizador de 33 años que en una docena de años de carrera ha realizado apenas un corto (...) Su debut solitario en el largometraje es uno de esos extraordinarios "segmentos de vida" que saben hacer sobre todo los argentinos y que presentan una historia con un principio y un final que quedan fuera de la narración. (...)
Moreno conduce de la mano al espectador en la vida repetitiva y repleta de tiempos muertos de Rubén sacando excelente provechode la máscara expresiva de Julio Chávez que no debería quedar sin recompensa al término de este festival. (...)
El custodio es, dentro de su aparente sencillez, uno de los filmes más complejos vistos hasta ahora en Berlín con un cuidado obsesivo por la imagen y el sonido, un ritmo fascinante y un guión de primer orden en el que cada capítulo-secuencia es un compendio de descripción psicológica.
El público berlinés se adaptó muy bien al pausado desarrollo del filme y le brindó un caluroso aplauso.
¿Qué dirán nuestros críticos vernáculos cuando esta película llegue a las salas?
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