El primer gran éxito de El Caballero de la Triste Figura

Algunos han osado criticarme por hacer un blog, porque supuestamente es malgastar el tiempo. Para esos necios, y porque -parafraseando una vez más al gran Groucho Marx- hasta ahora este blog se ha dedicado a contar la historia pero ya es tiempo de que empiece a cambiarla, acá va la crónica de la primera gran influencia de este blog sobre la realidad:

Hace algunos días, la casualidad, el destino o vaya a saber qué hizo que mi recorrida por la blogósfera recalara en el blog La Beluga Azul, cuyo link está aquí a la derecha, bajo el merecidísimo rótulo de "gente linda".
Por entonces, el post más reciente hablaba de que a la autora le habían dejado una gatita en la puerta de su casa, y -al mejor estilo Zoo- hizo una convocatoria para bautizarla. Yo, ni lento ni perezoso cuando de proponer cosas se trata (no dejo pasar una encuesta sin votar, y por eso fue tan grande mi decepción cuando las encuestas que propuse en el blog fracasaron peor que Hadad y su noticiero con helicóptero de las 7 de la mañana -¿se acuerdan de eso???-), largué una serie de nombres que me parecían aptos para una gata. Entre ellos estuvo Casandra, como la profetisa hija de Príamo y hermana de Héctor y Paris, como aquella a la que Charly y Nito le daban la bienvenida en El tuerto y los ciegos, como la mina de la que se enamoraba Wayne en El mundo según Wayne... Y resulta que ganó! Fue el nombre que más votos obtuvo, y ahora esa gatita de Palermo lleva el nombre que yo propuse desde aquí. La felicidad me embarga.

Y como si algo faltara, la blogger vino a descubrir que Casandra está preñada!!! Los hijitos de Casandra nacerán en unos 15 días.
Las crías son una bendición. Ojalá que vengan con un pan (para La Beluga y para El Caballero) bajo las patas delanteras. Y que sean sanitos.