Informa eBlog que la Cámara Argentina de Productores de Fonogramas y Videogramas (Capif) persigue a los usuarios argentinos que hacemos circular música por la web. La idea sería “prevenir acciones legales”, y para ello envían mensajes con textos de este tipo:
“Se ha detectado que desde su computadora se pueden estar poniendo a disposición de terceros archivos de música que contienen obras e interpretaciones protegidas por los derechos de propiedad intelectual. Cuando se intercambia música sin licencia se infringe la Ley de Propiedad Intelectual”.
Otro mensaje apela a la solidaridad con los músicos y a la pérdida de puestos de trabajo entre los artistas, y en un tercer texto llega lo increíble: “Ayude a que la creación musical siga existiendo”.
¡Como si Mozart hubiera necesitado de una discográfica para componer!
Y lo peor que eso nos lo dicen a nosotros, que tenemos que hacer rodeos en cualquier estación o en las veredas de los centros comerciales para sortear a los enormes puestos que venden CDs truchos al lado de la policía y las autoridades, que hacen la vista gorda.
En relación con esto, el sitio español copianos.com informa que desde el 1° de noviembre en España se reduce de 50 a 40 mil el número de ejemplares que debe vender un disco para ser "disco de oro", y de 100 a 80 mil para llegar al platino. Nada se pierde, todo se transforma. Se les acaba el kiosquito, muchachos.
Y recuerden una frase de Julián Gallo: "En Internet, todo lo que vale la pena es gratis".
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