lunes, 11 de agosto de 2008

Mojar la galletita

Una excelente campaña publicitaria de las galletitas Oreo, que usa como soporte el ascensor de un centro comercial.



Vía OpenAds

9 comentarios:

Luna dijo...

Muy bien por la creatividad!. Debo confesar que no me gusta mojar la galletita en la leche, ni en nada. Pero he notado que hay gente que sí. Saludos!

Cristian Vázquez dijo...

A mí no me gustan las Oreo (los argentinos las conocemos como "óreo", aquí en España lo pronuncian grave, "oréo") porque no me gusta el chocolate. Pero la gente dice que son muy ricas. Y mojadas en la leche, más aún. Para mí, nada mejor que las medialunas...

Luna dijo...

No sé como serán las medialunas españolas, acá ya no es tan fácil que sean de calidad. Extraño las croissants francesas que tienen historia propia. Parece que los vieneses las crearon en conmemoración a la derrota de los Turcos en el siglo XVI. Este pastellillo tenía justamente la forma de Luna creciente en referencia a la bandera de los derrotados y de allí su nombre (Lune croissante)
Saludos!

Cristian Vázquez dijo...

Estimada Luna, nadie mejor que alguien con tu nombre para un diálogo sobre estos temas. Pero resulta que yo no hablaba de las desabridas medialunas españolas, llamadas precisamente croissants (o su variante castiza cruasanes), sino de las únicas e inimitables medialunas argentinas. Entrar a un bar, en Buenos Aires, Florencio Varela o cualquier otra ciudad argenta y pedirte un café con leche con medialunas, es uno de los mayores placeres del mundo.

Anónimo dijo...

Qué raro que a alguien no le guste el chocolate. Tanto (o un poco menos, en realidad)como que no le guste el dulce de leche. O el helado. O la milanesa con papas fritas, no?

Luna dijo...

A mi me gusta el chocolate pero no el dulce de leche. Muero po las milanesas con papas fritas.

Cristian Vázquez dijo...

Sí, es raro, somos pocos los que no gustamos del chocolate. Los que no gustan del dulce de leche también, aunque fuera de la Argentina eso parece una extravagancia menor. No sé quiénes somos más: si los que no gustamos del chocolate o lo que no gustan de la Coca Cola.

Las milanesas con papas fritas y huevos fritos son el plato más exquisito del mundo. Las pizzas les pisan los talones.

Luna dijo...

Imaginate la cara que me ponen cuando pido facturas sin dulce de leche, masitas sin dulce de leche, torta sin dulce de leche, helado de cualquier gusto menos de dulce de leche.
Coincido con lo de la pizza, sobre todo si es napolitana

Anónimo dijo...

De todos modos, mucho más ricas que las foráneas óreo o oreo, son las melbas o las panchitas.

Clara